¿Quieres mejorar tu casa dotándole de un toque de innovación y profesionalidad? La empresa Raudoor (C/Molino, 33 Polig. Ind. 09300 Roa de Duero Burgos), con sus servicios consolidados en el sector ofrece esa posibilidad. Y es que se dedica a la instalación de puertas automáticas y a la fabricación y distribución de puertas, portones y vallas de aluminio. Todo ello desde 2014. David Rioja es el líder de un negocio que empezó él solo y que cuenta ya con cuatro trabajadores. Y es que si necesitas una puerta nueva tienes múltiples opciones. En Raudoor ofrecen puertas seccionales, industriales, de vidrio, enrollables y rápidas. "Nuestras puertas rápidas de lona, fuertes y resistentes son una de las mejores del mercado, con grandes posibilidades de opciones y acabados", explica David.
¿Qué servicios ofrece? Raudoor tiene dos ramificaciones que le permite actuar en diversas zonas geográficas de España y parte del extranjero. "En instalaciones nos movemos en ámbitos provinciales o regionales. No queremos ir a donde no podamos dar un servicio postventa de garantías. En la fabricación solo llevamos un año y nos movemos a nivel nacional. Hemos llegado incluso hasta el sur de Francia. Tenemos distribuidores en la zona norte de españa, Madrid y Levante", aclara Rioja.
Este proyecto comenzó su andadura con la instalación de puertas automáticas solamente, pero se amplió hasta la fabricación de portones. "Tenemos los conocimientos y la maquinaria para trabajar el aluminio", expresa David. Un elemento que otorga muchas ventajas respecto al tradicional hierro que se viene utilizando desde hace años. "Con el aluminio no hay corrosión y tampoco se precisa de un gran mantenimiento. A su vez, se puede conseguir el acabado que se quiera (madera, colores imitación a óxido...) como no ocurre con el hierro", afirma. Además, hay que añadir que las puertas de Raudoor tienen el marcado CE, que es la garantía por parte del fabricante de que su producto cumple con los mínimos requisitos legales y técnicos en materia de seguridad de los Estados miembros de la Unión Europea.
Para llegar aquí ha sido fundamental la ayuda que les han brindado desde JEARCO. Sus cursos de formación han sido claves. "Estamos muy contentos. Es un colectivo que se preocupa de la formación de los asociacidos. No todos los empresarios tenemos conocimientos económicos. No solo hay que tener un conocimiento del trabajo, sino de documentación o de gestión del personal. Cada cierto tiempo nos ofrece formación importante muy necesaria", expresa. Ante estas prestaciones, desde la empresa aseguran que tienen actualmente un media de 200 clientes al año. Una cifra que contrasta que lo que ha sufrido en 2020 y, más especialmente, en 2021. "Fue peor para nosotros el año siguiente al coronavirus que el 2020 porque teníamos trabajo acumulado ya cerrado. El año pasado fue más complicado porque había que buscar clientes y la economía no acompañaba. Hemos retomado todo a base de tiempo", asevera David.
¿Qué tiene Raudoor que no tengan otras marcas por la zona de la Ribera? En Roa de Duero hay muchas empresas que ofrecen servicios similares por la gente que viene de otras regiones a montar su negocio allí. Sin embargo, David tiene la clave del éxito. "Llevamos menos años en esto que otros, pero somos líderes en el sector. Nuestra gran virtud es que damos un servicio postventa lo más rápido posible y cuidamos al cliente. A largo plazo es una ventaja competitiva. Al dar un buen servicio el boca a boca funciona muy bien", analiza.
Pese a tener su página web, es a través de ese método tradicional por el que este proyecto no para de crecer. "Si haces un buen trabajo a un cliente, este se lo cuenta a su vecino y finalmente nos acaba llamando. Lo tenemos comprobado que es asi", desgrana David. Este sector, en conjunto, solo tiene una carencia que suplir. La falta de mano de obra cualificada procedente de las nuevas generaciones. Y es que la mayoría de jóvenes no contemplan este trabajo como una salida laboral soñada. Un aspecto que desde Raudoor observan con preocupación. "Nos hemos dado por vencidos. No podemos crecer más al no poder encontrar gente que quiera aprender el sector", verbalizan.
¿Y cual puede ser la solución? David contesta: "Que a la gente que trabaja y no llega a final de mes se le ayude más. Producimos riqueza y eso hay que valorarlo desde las administraciones". En definitiva, Raudoor es el ejemplo de que con constancia y profesionalidad se puede triunfar en un sector económico. La fuerza del "boca a boca" y la calidad de sus productos hacen el resto.